Es sabido
que todo buen farmacéutico
tiene cabello gris
y ojos profundos

Esto implica desconfiar
de los farmacéuticos rubios
pelirrojos y
ni qué hablar de los morochos
con miradas ansiosas

Cuando voy a la farmacia
me fijo en todos estos detalles

Una vez caí con un farmacéutico
calvo
de dedos largos
y de voz tenaz

No supe qué hacer
y sigo estando engripado


Néstor Ponce / Culinarias / Económicas / Médicas / Deportivas