Siempre pensé que los huesos, con su destello mineral
de piedra pulida por la lluvia, son lo más digno de nosotros:
sobreviven largamente a la putrefacción indecorosa de la carne
y no tienen la astucia ni la maldad del alma.

(De La experiencia concreta, 1990)
César Cantoni / Intemperie y otros poemas