Una calle Salvador Allende ... en el mundo - 01/2010

El viernes 15 de enero 2010 a las 18 horas (UTC) un ataque informático a Una calle Salvador Allende puso fuera de servicio el servidor que nos alberga.

Calle Salvador Allende. Muerto defendiendo la democracia - Allende en el mundo

Calle Salvador Allende. Muerto defendiendo la democracia - Allende en el mundo

"Calle Salvador Allende, Presidente de la república chilena. Muerto defendiendo la democracia" Francia, ciudad de Saint-Ouen-l'Aumône.

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El sitio logró ser repuesto horas después que las elecciones presidenciales en Chile dieran como ganador a un Sebastián Piñera "mercachifle ... capataz del lucro y la desigualdad", según las palabras del escritor Luis Sepúlveda.

Hoy, algunos artículos de la prensa internacional ilustran el resultado de las elecciones con fotografías de manifestantes pro-Piñera enarbolando imágenes del dictador Pinochet. Los antiguos torturadores; los responsables de desapariciones de personas, de asesinatos, de violaciones planificadas a los derechos humanos; sus cómplices de ayer y de hoy, están de fiesta.

Hoy, Una calle Salvador Allende está de vuelta en la red. La calle ... es lo que nos va quedando.

Comentarios

1. 19 enero 2010 - por Haití / Galeano

Los pecados de Haití / Eduardo Galeano - Comentario desplazado aquí ...

2. 20 enero 2010 - por R.d.C.

Entre ayer y hoy antes del medio día, Piñera ganó más de 140.000 millones de pesos; no sé cuánto será en euros, deben ser miles de millones, mi pobre calculadora barata no se la pudo... un euro es algo así como 700 pesos. Esto simplemente calculando la ganancia en la bolsa del valores de sus acciones de LAN, la bolsa suspendió las operaciones porque hay una disposición según la cual cuando los valores superan el 20 % de aumento paran para hacer un procedimiento de rutina para verificar que está pasando. En los medios no se dice una palabra sobre esto. (fuente: Radio Bío Bío)

Sin ir más lejos anunció profundos cambios en CODELCO y los empresarios ya están anunciando sus peticiones, que si no incluyen relanzar el trabajo infantil es simplemente porque se les olvidó o está implícito en las otras.

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Saludos

3. 20 enero 2010 - por Luis Casado / Ciudadano

La revolución

Reconociendo el triunfo de la derecha montuna Ricardo Lagos habló de revolución. La que hizo la Concertación. Tú ya sabes, ese "giro o vuelta que da una pieza en torno a su eje". Del latín "revolutio" = regreso. Una revolución permite describir un largo camino circular para volver al punto de partida. Lagos tiene razón. Deben ser las únicas revoluciones que le gustan.

Y se refirió a lo realizado, catalogándolo como "cambios gigantescos". La mejor descripción de los "cambios gigantescos" que la Concertación hizo durante veinte años la dio hace algunas semanas Jorge Arrate cuando le entregó su apoyo a Eduardo Frei: "En Chile la derecha lo tiene todo, todo, incluyendo los equipos de futbol. Solo les falta el gobierno". Tranquilo Jorge: ya es cosa hecha. Ahora también tienen el gobierno. "Cambios gigantescos", "revolución". Volvimos al punto de partida.

Chile sigue siendo regentado por la Constitución de la dictadura.

El sistema binominal sigue negándole al país un régimen político democrático.

Los chilenos siguen siendo adultos no emancipados, cretinos congénitos, no ejercen derechos ciudadanos, tienen sobre sus cabezas un tutor eterno.

La educación sigue privatizada, continua generando lucro y poniendo en peligro el futuro de las nuevas generaciones.

La salud es fuente de riqueza para unos pocos, un negocio, terreno fértil de colusión, de carteles, de acuerdos espurios a espaldas de la nación.

La Araucanía esta militarizada, se asesinan mapuches.

Se ha privatizado el mar, se ha entregado al pillaje de las multinacionales el territorio de todos los chilenos. Pero con Bolivia se es patriota: "ni un milímetro de territorio para Bolivia".

Se entregó el cobre. El cobre fue entregado a la voracidad del gran capital.

La distribución de la riqueza creada con el esfuerzo de todos es una de las peores del planeta. Una "vergüenza" según personeros de la propia Concertación.

Los salarios son otra vergüenza, esta vez según destacadas autoridades eclesiásticas.

Los sistemas de transporte público son una fuente de corrupción, de peculado, de robo, de malos servicios, de negociados.

La destrucción del medio ambiente, la contaminación, el maltrato a la naturaleza, hacen de la Conama un mal chiste. Respiramos mierda. Mierda.

Ha habido, hubo, crecimiento. ¿Para quienes? Chile, el país rico lleno de pobres. País arribista, que entró en la OCDE ocultando a sus pobres, las hordas de perros vagos en las calles, la mugre, la miseria. País de pobres que sobreviven con bonos. Pero que está en la OCDE.

Se termino con los servicios públicos. El agua, la energía, las telecomunicaciones forman parte de la modernidad de un mercado expoliador.

Dicom es "Big Brother", con poder de vida o muerte sobre los endeudados.

Los hogares chilenos deben más de 70 mil millones de dólares en créditos al consumo. Casi 70% de su salario disponible anual. Y el endeudamiento crece, se vive a crédito, con tasas de interés usureras.

La pequeña y la mediana empresa son discriminadas, estafadas, asesinadas por la "comunidad financiera".

"Cambios gigantescos". "Revolución". Volvimos al punto de partida.

Por Luis Casado. Publicado también en El Ciudadano - Chile

4. 20 enero 2010 - por C. Cienfuegos

Hola:

Bueno, que gane Piñera es desagradable y sería preferible tener a Frei como Presidente, pero al final es lo mismo, a pesar de que se nos dijo mil veces que no es lo mismo, y yo guardé silencio cada vez, es lo mismo, más feo, más vulgar, menos culturoso... pero lo mismo... Piñera no hará nada más terrible que el Código Minero, por ejemplo... y supongo que matará menos mapuches que la Concertación, mapuches que por lo demás votan por la derecha... (ver las estadísticas) Es lo mismo, un poco peor por el lado de las formas y mucho peor en lo que es lo internacional, en que se va alienar prudentemente en un eje, difuso aún, con Perú, Colombia, Panamá, Honduras...

Me da un poco de pena ver a mis amigos desesperados o deprimidos, espero que se les pase, y sobre todo espero encontrarlos en algo que no sean tonterías como "refundar la concertación" o pelotudeces absolutas como "reencantar"... te lo juro es una palabreja chilensis en voga desde hace un tiempo, mientras esperan que lleguen las bestias fascistas rompiendo puertas y llevándolos a campos de concentración donde los someterán a tener que escuchar "ad eternum" al hermano de Piñera cantándoles canciones de protesta...

En general todo se ve, se discute y entiende en el campo de las instituciones del estado, de las instituciones de la supuesta democracia representativa, nadie pone en cuestión algo tan simple como el hecho de que hablar de democracia y "fiesta cívica" es un chiste de mal gusto en las condiciones de una sociedad en que TODO está en manos de una oligarquía astuta y socarrona, que administra alegre y eficazmente este pequeño fundo ubicado en el fin del mundo, en que los unos y los otros se tratan de tú, en que los unos y los otros se encuentran y se conocen y se respetan en el cuadro de ese idílico país irreal en que hasta los pobres no saben que lo son, en ese espantoso país de la "clase media baja aspiracional" un engendro que es muy real si tu conoces la intimidad de esos enormes barrios en La Florida, Maipú, Puente Alto... esos millones de "nuevos chilenos" estúpidos, consumistas, bobos y amedrentados en la misma medida que aspiran a un poquito más, una migajita más de deudas, de tele-basura, de pretensión absurda y pretenciosa... es lo peor de lo peor, son los que están felices de tener un presidente rico, y que al mismo tiempo se sienten poco menos que anarquistas, porque "yo señor, yo no creo en la política sino en el esfuerzo y la viveza de nosotros los que estamos ganando..." porque los pobres imbéciles se sienten ganadores... y esa basura humana es el resultado de la concertación, hijos de Lagos y nietos de Pinochet. Son los que votaron por Marco Henríquez, ese pinche cabrón, y que después se volvieron con toda naturalidad a votar por Piñera y que son adoradores de Santa Bachelet, ese milagro chilensis, loado sea su nombre impuro, son los que creen que la cultura de un país son espectáculos de calle y van por decenas de miles a mirar a la muñeca que camina, (merci la France) o que la economía va bien cuando a Piñera le va bien, y un largo etc.

En todo caso, las cosas no están tan peor como se piensa, ya estaban demasiado mal, el problema es que no se quiere ver la realidad.

Saludos

5. 20 enero 2010 - por Nico

Por si alguien tenía dudas : además de agitar fotos de Augusto Pinochet los manifestantes piñeristas gritaban "General Pinochet, este triunfo es para usted”

6. 20 enero 2010 - por Carmen

Hola. Una nota de interés del diario español La Vanguardia:

Pinochet sale del armario

La policía también está preparada para reprimir a la derecha, si hace falta. Cuatro jinetes de carabineros, con chaleco antibalas y casco, y sus cuatro caballos, miran atentamente a los seguidores de Piñera, que ocupan la plaza Italia, tradicional centro de celebraciones deportivas de la capital.

Muy cerca, en la allendista Alameda, Piñera ha acabado su discurso y se ha ido sacando el cuerpo por el techo solar de su coche y ondeando una bandera chilena.

La gente lleva bandas presidenciales que se venden a mil pesos (1,4 euros) y tira confeti.

En corrillo, un centenar de personas, la mayoría jóvenes, baila, bebe y canta. Pero hace tiempo que esos cánticos, que tienen un apellido por denominador común, no se oían. El repertorio es extenso. "Libertador de Chile, Augusto Pinochet". "Viva Chile, Pinochet". "General Pinochet, este triunfo es para usted". "Mientras Chile exista, habrá pinochetistas". "Augusto es un valiente".

Una joven pareja habla con el cronista. Cristóbal, 22 años, dice que estuvo en el funeral de Pinochet y se alegra de que por fin la Concertación deje de "robar plata". Dominique, 19, siempre ha vivido en democracia, pero es pinochetista porque su familia "sufrió mucho" durante el gobierno socialista de Allende.

Un coronel de carabineros, que oculta su alegría, disuelve pacíficamente el corrillo para que pasen los coches. "Sigan allá, no hay problema", repite sonriente.

El grupo se recompone sobre la acera y sigue cantando. "El que no salte es comunista maricón".

"Frei, escucha, ándate a la chucha (mierda)". "Comunistas, maricones, os ganaron los valientes campeones". "Se fueron los ladrones". "Y van a ver, somos derecha otra vez". Un equipo del Canal 13 -propiedad de la Iglesia católica- es abucheado y debe irse. "¡Comunistas!".

Dos horas más tarde, la plaza Italia está casi vacía, pero en una esquina un equipo de CNN Chile hace un directo. Una joven que lleva una foto de Piñera no para de increpar al periodista. Acaba el directo y se acerca para puntualizarle: "¿Por qué dijiste dictadura? ¡Se dice gobierno militar!".

Robert Mur 19/01/2010 - La Vanguardia, España.

7. 22 enero 2010 - por Punto Final

Chile: La derecha viene a cenar
Manuel Cabieses Donoso

Las cifras lo dicen todo. La elección del 17 de enero no merece mayor discusión. Lo concreto es que a partir de marzo, Chile tendrá un gobierno de derecha que se sumará a la mafia de enemigos del proceso liberador de América Latina.

EE.UU. reserva a Piñera un lugar destacado junto a los regímenes de Colombia, Honduras, Panamá y Perú. Un grupo tenebroso que intenta ampliar mediante elecciones o golpes de Estado según la receta hondureña.

El propósito es frenar el proceso de independencia y socialismo democrático que se reinició en la última década. Ese proceso tiene sus enclaves en Venezuela, Cuba, Bolivia, Ecuador y Nicaragua, los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA). Pero cuenta también con defensores en Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay.

La dirección principal de la contraofensiva norteamericana persigue eliminar -usando cualquier medio- al gobierno revolucionario del presidente Hugo Chávez. La revolución bolivariana es considerada la pieza maestra que sostiene y articula al renacido movimiento por la independencia y soberanía de los pueblos que desafía la hegemonía yanqui en la región.

El próximo 26 de septiembre hay elecciones parlamentarias en Venezuela. El presidente Chávez enfrentará por enésima vez -desde 1998- el veredicto ciudadano.

La oposición, casi toda digitalizada desde Washington, se jugará por retornar a la Asamblea Nacional -que abandonó voluntariamente en diciembre de 2005 para provocar un colapso institucional que no ocurrió-.Buscará usar esas elecciones para avanzar en un plan desestabilizador "a la hondureña".

En forma simultánea, junto con tejer las redes de conspiraciones políticas, financieras y militares, EE.UU. viene montando en torno a Venezuela un cerco de bases militares con asiento en Colombia, Panamá y las islas holandesas de Curazao y Aruba. Se les suma la reactivada IV Flota norteamericana que patrulla el Caribe con su carga de cañones y misiles. El gobierno venezolano ha denunciado las incursiones de aviones espías en su espacio aéreo.
Los aprestos de intervención -o de apoyo militar a un golpe- son tan evidentes que han despertado el rechazo del gobierno de Brasil.

El presidente Lula y las fuerzas armadas brasileñas saben que, a largo plazo, EE.UU. no se conformará con las enormes riquezas naturales de Venezuela. También intentará apoderarse de las reservas de agua de la Amazonia y de los grandes yacimientos de petróleo que existen en la plataforma submarina del Atlántico brasileño.

Todo lo anterior explica porqué la elección de Piñera ha provocado tanta expectación en el exterior, comparativamente más que en Chile. Desde luego los chilenos sabíamos -a través de los códigos del lenguaje de medias tintas a que nos hemos mal acostumbrado-, que la Concertación se presentaba derrotada a la confrontación electoral. Agotada como proyecto político y destrozada por disputas intestinas y ambiciones personales.

En cambio, en naciones que tienen fundados motivos de preocupación por el rumbo agresivo de la política de EE.UU., se creía que la Concertación -aun con todas sus vacilaciones y blandenguerías- saldría airosa de la prueba. A ese engaño contribuyó la imagen de una presidenta Bachelet con 80% de respaldo popular.
El tema internacional casi no se tocó en la campaña presidencial, impidiendo que los chilenos conocieran los peligros que afrontan pueblos hermanos.

El golpe hondureño ni se mencionó, tampoco la instalación de bases militares en Colombia y Panamá, ni el fracaso de la Conferencia sobre Cambio Climático en Copenhague, ni la crisis capitalista, ni… El listado de temas que tienen que ver con el mundo, la Humanidad y nuestra América Latina que los candidatos no abordaron en la campaña, es interminable. Repasarlo sólo sirve para confirmar la insularidad política en que vivimos.

Este factor -que ha producido ignorancia, erosión ideológica y despolitización-, permite a la derecha y a la Concertación manipular las conciencias de los ciudadanos y direccionarlas con técnicas de marketing y métodos farandulescos.
Piñera es parte de una "nueva derecha" que pretende haberse desvinculado del reciente pasado de dictaduras militares que atropellaron los derechos humanos en América Latina. Esta derecha -que ha conseguido esconder su ADN golpista- ha llegado a Chile para quedarse, por lo menos es lo que pretende.

La "nueva derecha" es un invento de los estrategas del Departamento de Estado que conduce Hillary Clinton, cuyo talante imperial se ha puesto en evidencia durante los últimos meses. El nuevo engendro político viene a reemplazar a los gobiernos socialdemócratas y/o socialcristianos, como el de la Concertación, que han sufrido un acelerado desgaste por su aplicado servicio al neoliberalismo y su traición a los trabajadores. Esta "nueva derecha" controla todavía pocos gobiernos y algunos, como el de Alvaro Uribe, apestan a muerto.
Por eso, la victoria de Piñera -con un programa populista que sigue las aguas de la Concertación pero que garantiza mano dura con el movimiento social para blindar la inversión privada-, es recibido con júbilo por los sectores más reaccionarios del continente. Sin embargo, la "nueva derecha" necesita victorias en países importantes como Argentina y Brasil (ya cuenta con México) e intentará meter su contrabando político en Venezuela y Ecuador para destruir esas revoluciones por dentro.

Para el chileno medio, atrapado en la telaraña de deudas que tejen 29 millones de tarjetas de crédito que constituyen su vía de acceso al consumo, la política es una galaxia lejana a su interés cotidiano. La democracia representativa sólo lo obliga a votar, pero no le reconoce derecho a participar.

Los asuntos políticos que atañen a su condición de ciudadano pertenecen al ámbito de lo accesorio y superfluo que no soluciona sus problemas concretos. Por eso, delega esos asuntos en los políticos profesionales a quienes, a la vez, considera unos zánganos aborrecibles. No es para menos: entre los 14 millones de pesos mensuales de la dieta de un diputado, y los 257 mil pesos que gana más de la mitad de los trabajadores chilenos, hay un abismo de desigualdad.

El quintil más bajo de ingresos, según la encuesta Casen, destina más del 60% de sus salarios a pagar deudas que superan todas las fronteras de la usura. Este abismo de desigualdad no intentaron cerrarlo los partidos de la Concertación -hoy en liquidación- y menos lo hará esta "nueva derecha" exultante que celebró su victoria bailando y descorchando botellas de champaña como en 1973, cuando instigó a los militares a derramar la sangre de miles de chilenos.

Trabajadores agobiados por extenuantes jornadas, viviendo el constante temor de pasar a integrar el ejército de 800 mil cesantes, temiendo enfermar por el costo de la atención médica y de los medicamentos y por las interminables listas de espera en los hospitales, con las esperanzas perdidas de obtener educación de calidad para sus hijos, viviendo en la promiscuidad de departamentos de 45 metros cuadrados, acosados por la droga y la delincuencia, relegando a la clandestinidad del recuerdo familiar las atrocidades de la dictadura militar-empresarial, ¿qué ánimo o qué tiempo tendrán para preocuparse de la dimensión política del triunfo de Piñera?

Por eso, no debe extrañar que cientos de miles de chilenos hayan votado por la "nueva derecha", esperando ingenuamente que ese gobierno aliviará sus miserables condiciones de vida. Esta actitud pasiva e indiferente al retroceso político que significa legitimar a los herederos de la dictadura y facilitar así las amenazas a la soberanía de pueblos hermanos, es resultado del fracaso estruendoso de la Concertación.

Pero también de la injustificable tardanza de la Izquierda para superar su fragmentación y levantar una alternativa popular e independiente. Ahora estamos en el punto de volver a empezar, porque la historia no ha terminado. De nosotros depende acortar el tiempo que la derecha pretende quedarse en el poder.

"Punto Final", Nº 703 -- 22/01/2010

8. 22 enero 2010 - por Eduardo Palma

No estoy de acuerdo con el antiamericanismo primitivo que contiene este artículo.
Los EEUU no tiene la culpa que los chilenos sean boludos y que voten por la derecha.

Saludos

9. 27 enero 2010 - por Escuela de Salud Pública Doctor Salvador Allende

Cumpliendo una resolución del año 2008, este 26 de enero 2010 la Escuela de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, pasó a llamarse Escuela de Salud Pública Doctor Salvador Allende.

Salvador Allende ingresó a los 18 años a la Escuela de Medicina. Fue sucesivamente elegido Presidente del Centro de Alumnos, Vicepresidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH), y representante del estudiantado de la Escuela de Medicina ante el Consejo Universitario.

Egresó de la Escuela en el mes de mayo de 1933.

Se desempeñó como ayudante de Anatomía en la Casa de Orates y trabajó en la Asistencia Pública de Valparaíso y en Anatomía Patológica en el Hospital Van Buren. Años después de su paso por el citado centro asistencial, señaló: "Con estas manos he hecho mil quinientas autopsias. Sé qué quiere decir amar la vida y sé cuáles son las causas de la muerte".

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10. 27 enero 2010 - por Salvador Laura

Jorge Martin, fugado de la cárcel pública hace 20 años, es detenido en Santiago de Chile.

Queridos compañeros y amigos os ruego difundir.

Hoy en el aeropuerto de Santiago de Chile, ha sido detenido mi hermano, Jorge Martín Martínez.

Su delito haber luchado dando lo mejor de sí en contra de la dictadura.

Cuando los asesinos de nuestra familia y de miles de chilenos campean libremente por las calles, a los patriotas se les encarcela y se les prohibe volver a su país.

Jorge lo único que quería era abrazar a sus sobrinos dejados huérfanos por carabineros de Chile cuando asesinaron a sus madres y al hijo de una de ellas. Jorge fue torturado y paso casi cinco años en las carceles de Pinochet.

Cometió otro delito, hizo uso de su legítimo derecho de todo preso político a fugarse. Un 29 de enero de 1990. Gloriosa fuga de 49 prisioneros de la cárcel pública de Santiago de Chile. Este 29 de enero se cumplen 20 años de aquella gesta.

El además es ciudadano español, hijo de un republicano que viajó a Chile en el barco de la esperanza, llamado Winnipeg, donde llegaron a Chile casi 3.000 españoles. Jorge una vez fugado vino a refugiarse a la tierra de su padre y aquí ha permanecido sin poder volver a Chile. Hace unos días tomó la decisión de volver por todo lo antes expuesto, viajo lleno de ilusión y ahora está detenido.

¿Cuál es la democracia chilena?

11. 2 febrero 2010 - por Carlos Guerra

El Temor a la derecha.. fue el llamado desesperado de los miembros de los partidos de la consertación, realizado al ocaso de su festín de un poco más de dos décadas. Faltó puntualizar a qué derecha se refería el llamado, pues las últimas dos derechas que hemos sufrido los chilenos del último cincuentenario es la derecha pinochetista y la derecha concertacionista... pero ambas son derecha. Ambas con habilidad de comerse el país de una forma u otra. Los que no somos miembros de ninguna de esas coaliciones e incluso.. de ninguna empresa de socorros mutuos (perdón.. partido..) o maquinaria de poder para servirse al país, hemos sido testigos primero, de la gran cena que se pegaron los "señores empresarios" que apoyaron y otros, que nacieron bajo la sangre (perdón...sombra..) del dictador militar. Luego vimos a muchos de los mismos y tambien muchos "nuevos empresarios" que se modernizaron y nacieron dentro de los sombríos pasillos de los sités multipartidarios, donde las cúpulas centrales y subalternos (cupulitas) regionales de la Concert, se repartían los quesos de Chile. No me vengan a hablar del "temor a la derecha", como lograron ganarse los votos de muchos chilenos durante las elecciones anteriores, especialmente la del caudillo antecesor de la Sra. bachelet.. cuando a punto de quedar derrotado por Lavín, gritó... NO a la Derecha!! y cuando se le dijo lo que los chilenos queríamos del arcoiris prometido.. dijo.. "votad por mí..!!! pues HE ESCUCHADO AL PUEBLO!!! " abriendo los brazos cual profeta del tiempo de Abraham.. Al cabo de los años... fué el mejor gobierno de derecha que haya tenido el país, tanto así, que el empresariado chileno (el antiguo y el naciente..), le otorgó todos los honores y agradecimientos por profundizar los principios del libre mercado y otorgar las más grandes facilidades para el ejercicio del más brutal capitalismo de los últimos años.

Hoy el llamado al terror de la derecha no funcionó. No funcionó pues los chilenos nos acostumbramos a ser gobernados bajo los principios y políticas de derecha, entonces dió lo mismo uno u otro. Incluso, es mejor una derecha en donde no estén ilusoriamente incorporados aquellos que siendo de origen antiderechistas, creían que allí obtendrían los beneficios de la repartija de poder y queso para los miembros de sus respectivas maquinarias. Era lamentable la presencia de demócratas y humanistas verdaderos dentro de la concertación, pues solo logró desarticular y desmovilizar los movimientos obreros, estudiantiles y sociales, durante todos esos años, pues se tenía la esperanza que su presencia al interior del conglomerado, podría empujar hacia objetivos sentidos por el ciudadano y sus reivindicaciones sociales. Por otro lado se veía como desleal apuntar por exigencias hacia líderes que no siendo derechistas, estaban allí dentro, mendigando una migaja de poder y queso. El resultado es que el movimiento social se desmanteló, se infiltró de líderes faranduleros y conformistas, los que terminaron por acallar gran parte del llamado social y adormecerlo a tal punto que al final dió lo mismo una derecha que la otra. ..¿de qué temor me hablan.. si las políticas del trabajo, educacionales, de salud con sus isapres, de pensiones con sus afps, de inversión en infraestructura pública con barrios marginales y barrios ricos, de educación superior y la destrucción sistemática de las universidades del Estado, del medio ambiente y el triste espectáculo de la aplicación legal y su institucionalidad absolutamente politizada en beneficio del poder económico, etc..etc.. son y han sido tán de derecha desde que pinochet, sus ideólogos y seguidores se tomaron el poder en nuestro país..?

Es de esperar que después de esta experiencia política de las últimas décadas, de este experimento que quizás fue útil durante los meses en que se derrotó por las urnas, a la pretención de continuar con pinochet, es de esperar que las fuerzas políticas del país hayan madurado y se estructure una nueva configuración, en que se distinga con absoluta claridad lo que es el bien colectivo de los chilenos, de aquel sentido personalista e individual del beneficio que otorga el país a sus ciudadanos. En que se aparte ideológicamente con claridad el pensamiento solidario del egoista, en que se le otorgue más valor y defiendan los derechos colectivos por sobre los derechos individuales cuando éstos se tornan antagónicos entre sí. En que se separen con claridad aquellos que ponen al ser humano en el centro de su preocupación, de aquellos que engañosamente dicen lo mismo, pero por sobre ello, ponen al dinero o capital como el dios de la creación. En palabras simples, es de esperar que los ideólogos y líderes sociales (políticos y todos), le digan amistosamente adiós a sus obsoletos enjuagues (perdón.. lealtades) y se sientan en libertad de agruparse de una forma tal, que los ciudadanos sepamos con claridad quienes son los nuestros, quienes son los camaleones, quienes son los vendedores de ilusiones y obviamente, quienes son los del otro lado. Ya no necesitan juntarse para derrotar a la dictadura de pinochet.. gracias!... fue bueno para esos meses, pero ahora estamos en otra y ya se cobraron con creces el favor realizado. tanto así, que le regalaron en bandeja de plata el poder a los mismos a quienes le dieron el sentido para concertarse en el pasado. Gracias por dejarnos casi en el punto de partida. Ahora vamos a lo que sigue.. y para ello queremos aguas claras, frías y limpias.. no turbias, ni tibias, ni podridas como llegaron a ser despues de estas dos décadas.